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SI ES ABRIL, TOCA REMEMORAR EL RMS TITANIC

A las seis de la tarde del jueves 11 de abril, se oyó en cubierta el sonido de la corneta del Titanic, que indicaba que era hora de que los pasajeros se vistieran para cenar. La primera noche en Cherburgo se había prescindido de la etiqueta, pero en adelante “se impuso la norma de vestir siempre de gala”… Para Gracie, como para el resto de los caballeros que viajaban en primera clase, eso significaba simplemente ponerse una corbata blanca y un frac o esmoquin, prendas que solían llevar siempre en sus equipajes…

La mayoría de las mujeres llevaba, envuelto en papel de seda, un vestido distinto para cada noche, si bien reservaban sus atuendos más espléndidos para los domingos o los lunes… La belleza de las mujeres a bordo “fue objeto de observación y admiración”. Pero ese despliegue de encanto conllevaba un gran esfuerzo, y la hora de vestirse era un momento de gran tensión para las criadas de las damas. Solo la colección de ropa interior asombraría a una mujer de hoy en día, empezando por los corsés que aún llevaban las damas de clase alta en su mayoría… En 1912, el elegante crujido de la ropa interior era parte del encanto de una dama bien vestida, y ese sonido se oía todas las noches en la gran escalinata del Titanic durante la procesión que se encaminaba al comedor.

Estos son algunos párrafos extraídos del libro «Titanic: El final de unas vidas doradas» de Hugh Brewster, donde se deja constancia de la importancia que tuvo la etiqueta, las formas y el saber estar durante la travesía del Royal Mail Steamship Titanic que acabó de la manera tan trágica, un 15 de abril de 1912.

Flotador recuperado de los restos que permanecen en el fondo del Atlántico Norte, expuesto en Titanic The Exhibition

El pasado día 10 de abril, como suele ser habitual, las redes sociales que giran en torno a conmemoraciones históricas nos recordaron que el RMS Titanic partía del puerto de Southampton con destino a Nueva York. Empezaba un viaje de cinco días y trágico final, que desde 1912 no ha dejado de sumar incondicionales a un mito que se ha hecho grande con el paso de los años.

De todos es conocida la historia de este barco, por lo que no vamos a pararnos a relatarla, pero nos ha parecido interesante recoger algunas curiosidades para rememorar la efeméride, fusionando, revisando y ampliando dos antiguos posts que publicamos en el blog, en los siguientes bloques temáticos: etiqueta, curiosidades, conmemoraciones, réplicas y mucha, mucha mitomanía.

La era Titanic, entre la época eduardiana y los «felices años 20»

Titanic fashion, 1912 | Dentro de la historia de la moda, los años anteriores y posteriores al hundimiento del RMS Titanic se conocen como la Titanic era, una etapa de transición entre la era eduardiana y «los felices años veinte», donde continuó prevaleciendo el uso de enormes faldas y grandes sombreros.

Una forma de vestir donde la riqueza de clase se demostraba en el tamaño de los trajes, en el uso de tejidos recargados y en la riqueza de las joyas, tal y como reflejaban perfectamente los atuendos de los pasajeros de primera clase que embarcaron en el buque. Un estilo que cambiaría con la irrupción de Coco Chanel en el mundo de la alta costura, quien apostó por la practicidad de la ropa, que “menos fuese más” y que convirtió la sutileza en elegancia.

La tienda del Titanic está en Barcelona

En 1996 la tienda de moda vintage que hay en el número 20 de la calle Banys Nous, L’Arca Barcelona, recibió un importante pedido de vestidos y accesorios de época sin que se diese a conocer quien era el comprador, ya que lo hizo a través de una intermediaria americana.

Pasado un tiempo recibieron una sorprendente llamada telefónica, en la que se les comunicaba que todos los artículos vendidos habían ido destinados al vestuario de la película Titanic de James Cameron, que acabaría convirtiéndose en una de las películas más oscarizadas de la historia, contando entre dichos galardones con el del Mejor diseño de vestuario (Deborah Lynn Scott).

Una anécdota que le acabó otorgando a la tienda el sobrenombre de la “tienda del Titanic”.

Futility o un «ya lo predijeron los Simpson»

Actualmente estamos muy acostumbrados a que a cualquier acontecimiento que ocurre en el mundo, se le busque un paralelismo en alguno de los capítulos de la serie de animación «Los Simpson», ya que parece que sus guionistas tuviesen capacidad visionaria.

Pues bien, en el caso que nos ocupa, tenemos que mencionar que el escritor americano Morgan Robertson publicó una novela que llevaba por título Futility. El argumento giraba en torno a la historia del SS Titan, un gran barco de pasajeros que, en el mes de abril, durante un viaje que realizaba por el Atlántico Norte chocó contra un iceberg y se hundió, falleciendo la mayoría del pasaje, a pesar de que había sido considerado como insumergible…

Dado que el libro se escribió en 1898, catorce años antes del hundimiento del RMS Titanic, siempre se ha planteado la incógnita de saber si ¿fue pura coincidencia? o ¿fue el libro de un visionario?

El RMS Titanic, el megaship 5 estrellas de principios del siglo XX

Respecto a las dimensiones y a las características del barco, no cabe duda de que el RMS Titanic fue el más grande y el más lujoso de su época, a pesar de que hoy en día todo ello ha sido ampliamente superado por los megaships de las flotas actuales.

Sin embargo, en un momento de la historia en que los barcos eran considerados un mero medio de transporte en lugar de un espacio vacacional y de ocio, que contase con piscina, baños turcos, gimnasio, cafés y restaurantes, salones de lectura e, incluso, luz eléctrica y calefacción en todas las habitaciones de mayor categoría lo convirtió en un caramelo para los aristócratas y las clases altas de principios del siglo XX. De ahí que hubiese tantos personajes ricos y famosos entre los pasajeros que decidieron participar en ese primer viaje del RMS Titanic.

Es evidente que ese tipo de instalaciones, de tan alto nivel, requerían contar con menajes y lencerías acordes a ello. De ahí que la porcelana, el hilo y la plata fuesen algunos de los materiales usados en vajillas, cuberterías y ropas de cama. Todo un compendio de elementos lujosos que ayudarían a hacer más grande la leyenda del barco.

Exposición de diferentes objetos de menaje usados en primera, segunda y tercera clase. Titanic the Exhibition

La orquesta del Titanic: «Señores, ha sido un placer tocar con ustedes»

Entre las mil y una historias del RMS Titanic -quizás una de las más míticas alrededor del naufragio y hundimiento- está la que gira en torno al papel que desempeñaron los miembros de la Orquesta del barco, que se dice que tocaron hasta desaparecer bajo el mar y que ninguno de ellos sobrevivió. Una de las escenas más socorridas en la mayoría de películas y series rodadas sobre ese tema.

“A las 2:20 de la madrugada del día 15 de abril, la barandilla de popa del Titanic desaparece bajo las aguas, dejando como estela un enorme remolino… El millonario Benjamín Guggenheim y su sirviente Victor Giglio regresan a sus camarotes y visten sus trajes de etiqueta para, según dicen, morir como caballeros. Y mientras, la orquesta situada sobre cubierta en medio de aquella confusión no deja de tocar…”

Texto extraído del blog Titanic

El cuerpo de Wallace Hartley, director del grupo de ocho músicos, fue el único que se pudo recuperar y, según se explica, cuando lo encontraron llevaba un violín atado al pecho, cosa que se cree le pudo ayudar a mantenerse a flote durante algún tiempo.

Dicho violín, que fue retornado a la prometida del difunto y que, según parece, pasó por diferentes manos hasta el año 2006, fue redescubierto y sometido a diferentes pruebas para certificar su autenticidad. Uno de los elementos que ayudó a ello fue la placa de plata que llevaba en el interior donde se podía leer “Para Wallace de Maria por nuestro compromiso”.

Se vendió en una subasta por un valor de 900.000 Libras.

Recreación del violín de Wallace Hartley. Titanic the Exhibition

2012 | El centenario del hundimiento del Titanic

En 2012, con motivo de la conmemoración del centenario del hundimiento, se sucedieron las exposiciones, los documentales y las cenas conmemorativas, pero el evento más significativo fue volver a realizar la travesía prevista para 1912, con salida en Southampton y llegada al puerto de Nueva York, pero esta vez en el MV Balmoral.

Entre los elementos recreados exclusivamente para la ocasión estuvo un cuvée especial, en edición limitada de 4000 botellas, del champagne Henri Abelé, el que se sirvió en la última cena a bordo, la noche del 14 de abril de 1912.

Botellas de champagne Henri Abelé. Titanic the Exhibition

A la altura del lugar del accidente, se realizó una ceremonia ecuménica de recuerdo, en la que se lanzaron tres coronas de flores al mar y se izó la contraseña de la White Star Line, compañía naviera a la que pertenecía el RMS Titanic.

Titanic the Exhibition | Una exposición itinerante

En 2003 se presentó por primera vez la exposición Titanic the Exhibition, creada por Musealia, y que ya hemos podido ver en Barcelona en dos ocasiones.

A través de audiovisuales, objetos recuperados del fondo del mar, recreaciones de las estancias y fotografías, la leyenda del Titanic se ha hecho mucho más real y tangible. Una exposición ideal para los incondicionales del mito.

La exposición cuenta con una maqueta del RMS Titanic, de 12 metros de longitud y 4,5 metros de ancho, con el atractivo de estar abierta por la parte de estribor, lo que permite visualmente el interior del buque gracias a la minuciosidad de los detalles que se han incluido en su construcción.

Placa anunciando los precios de los pasajes para segundo y tercera clase, dependiendo del lugar de embarque

Los puertos de escala

Y si visitar la exposición puede saber a poco, siempre se puede incluir en la agenda viajera visitar el puerto de salida, los dos puertos de escala o el puerto de destino, a donde obviamente no pudo llegar, pero sí llegaron los supervivientes rescatados. Es decir, Southampton, Cherburgo, Cobh (antigua Queenstown) y Nueva York.

Por cierto, tanto en Southampton como en Cobh se pueden visitar lugares dedicados a la memoria del buque, como el Seacity Museum: Southampton’s Titanic Story o el Titanic Experience Cobh, además del Memorial que hay en esa ciudad irlandesa.

El Titanic en el cine y la televisión

Pensar en el RMS Titanic nos lleva inevitablemente a la película de James Cameron. No obstante, han sido muchas las versiones que se han hecho de la película.

Como entusiastas de la historia y del séptimo arte, hemos aprovechado para recopilar un listado de producciones cinematográficas y documentales que se han producido en torno a él. Desde la primera hasta la más mítica, la historia del Titanic se ha llevado a la pequeña y a la gran pantalla en numerosas ocasiones, con más o menos acierto.

En la lista hemos incluido desde las dos primeras producciones de cine mudo, que se rodaron inmediatamente después de la tragedia en 1912, hasta las producciones con mayor rigor científico en el contenido como es la de National Geographic.

Década de los años 10

El mismo año en que se produjo el hundimiento se produjeron dos películas.

La primera se estrenó solo 29 días después de la tragedia, y se trata de un cortometraje mudo cuyo guión escribió una actriz estadounidense y superviviente del naufragio, Dorothy Gibson, basándose en su propia historia. A pesar de su éxito, no se libró de las críticas debido a la explotación comercial de la tragedia que suponía.

Saved from the Titanic (Salvados del Titanic) (1912)

In Nacht und Eis (En la noche y el hielo) (1912)

Década de los años 20

Atlantic (1929)

Década de los años 30

Cavalcade (1933). La película giraba en torno a la vida de una familia durante los últimos años del siglo XIX y principios del XX, donde el Titanic se cruzaba en su historia.

Década de los 40

En 1943, dentro de la campaña propagandística nazi de Joseph Goebbels, se produjo en Alemania una película sobre el Titanic, en la que por primera vez se entremezclaron los acontecimientos reales con la ficción. Mientras que el guión desacreditaba a Estados Unidos e Inglaterra, ensalza el coraje de los pasajeros alemanes. La proyección, evidentemente, se realizó únicamente en los países europeos ocupados por Alemania.

Titanic (1943) La segunda versión alemana de la historia, rodada en la Alemania Nazi

Década de los años 50

Titanic (1953) – Trailer
https://youtu.be/4Q77mzeG9FI
A night to remember (La última noche del Titanic) (1958)

Década de los años 60-70

Según parece durante los años 60 y 70 la historia del RMS Titanic no despertó demasiado interés. No fue hasta finales de los 70 cuando se recuperó el tema en SOS Titanic.

Antes, en 1973, la popular serie de televisión británica Upstairs and downstairs incluyó el hundimiento del Titanic en uno de sus episodios, pero sin escenas específicas. Fue en el episodio «A house divided», correspondiente a la tercera temporada, cuando se produce la muerte de Lady Bellamy en la tragedia.

SOS Titanic (1979)

Década de los años 80

La década de los 80 trajo una de las películas más espectaculares rodadas sobre el Titanic. Fue la primera en que se escenificó su posible reflotamiento.

Raise the Titanic (Rescaten el Titanic) (1980)

Década de los años 90

La década de los 90 fue prolifera en cuanto a producciones. Con el incentivo de que ya se rodaron habiéndose localizado los restos del barco en el fondo del mar, en 1985.

Titanic (miniserie de dos episodios) (1996)
Titanic de James Cameron (1997) – Trailer (ganadora de 11 premios Óscar)

En 1997, paralelamente a la película más recordada del Titanic, se estrenó La femme de chambre du Titanic (La camarera del Titanic), una película franco-hispano-italiana dirigida por Bigas Luna, que pasó desapercibida por la fama que alcanzó la película de Cameron.

Años 2000s

Y con la llegada del siglo XXI llegó el «boom» cinematográfico del tema.

La véritable histoire du Titanic (2001)
Titanic: The Legend goes on (2001) (en dibujos animados)
Titanic II (2010)
Titanic: Blood and Steel (Titanic: Sangre y acero) (2012)
Titanic (2012)

National Geographic

Y no podemos finalizar este recorrido cinematográfico y televisivo sin realizar una mención especial al magnífico documental producido por National Geographic, con motivo de la conmemoración del centenario del hundimiento.

Titanic 100 years

MV Titanic II | El nuevo Titanic

Es evidente que la pasión por el mito nunca se ha perdido, y su interés por mantenerlo vivo es constante.

En 2012 se llegó a presentar un proyecto para construir una réplica real del Transatlántico, que llevaría por nombre MV Titanic II.

A pesar de toda la publicidad que se le dio inicialmente, el proyecto no acabó de llegar «a buen puerto», y en 2022 se abandonó de manera definitiva.

Para saber más: Titanic II (proyecto de navío)

Titanic expedition | De viaje al Titanic

Pero si de momento no se podrá viajar en la réplica exacta, lo que si es factible de hacer es turismo, sumergiéndote hacia sus restos en el fondo del mar.

Si lo que nos mostraban en la película de 1980, “Rescaten al Titanic”, científicamente ya se ha descartado -se sabe de manera fidedigna que nunca será posible hacerlo, e incluso se ha puesto fecha a su desaparición definitiva, lo que si que se ha hecho realidad es visitarlo allí en donde está. “Si el Titanic no viene a nosotros, ¡nosotros iremos al Titanic!”.

La empresa estadounidense OceanGate organizó una serie de expediciones exploratorias al fondo del Atlántico Norte en 2018, que han acabado convirtiéndose en una oferta viajera para turistas (que se unen a la expedición)… que evidentemente se lo pueden permitir económicamente.

Si te animas, aquí te dejamos el enlace a su oferta «viajera».

Comparativamente, el precio de ese viaje en la actualidad (más de 100.000$), es el mismo que tuvieron que pagar los «afortunados» pasajeros de Primera Clase, que participaron en el primer y último viaje del RMS Titanic.

Experiencia del bloguero Alan por el mundo, publicado en su perfil de Youtube

Ryan Mansion Boutique Hotel

Y si te gusta la historia del mito, pero no eres de mar adentro, una posibilidad «más factible» es viajar hasta St. John’s Newfoundland (Terranova y Labrador), y alojarte en este magnífico hotel: el Ryan Mansion Boutique Hotel.

Un lugar donde no solo tienen una escalera principal construida por los mismos que construyeron la del Titanic y, donde hace tiempo, ofrecían cenas que rememoraban las que se sirvieron en el comedor de Primera Clase, con una vajilla y unos utensilios que eran una copia exacta de los originales, encargados ex profeso en el Reino Unido.

Maqueta del RMS Titanic en Titanic the Exhibition

Para saber más:
Reseña de Titanic. El final de unas vidas doradas, de Hugh Brewster
Aquella fastuosa última cena
Encyclopedia Titanica
Titanic Universe
Fundacion Titanic

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